Packaging con humor

La idea no es solo facilitar a los clientes el uso del producto, sino también hacerlo de forma divertida.

Crear una relación emocional con el cliente es un factor de peso en su decisión final de comprar el producto. Un toque de humor puede aportar ese valor añadido que ayude a crear esa relación y fidelización con el consumidor .
Por ejemplo, Simon Laliberté, un diseñador canadiense, se caracteriza por incluir rasgos #innovadores, originales y siempre con un toque de humor. Elementos visuales que permiten presentar al comprador, rasgos atractivos y valores característicos de la marca. Así que quizás introduciendo un toque de humor en el #diseño de tus productos, encuentras ese gancho diferenciador que haga que los #compradores se vuelvan locos por él…